Arquitectura en Austria

En el centro histórico de Viena conviven de forma insólita la tradición y la nueva arquitectura. Será testigo de cómo las construcciones históricas se fusionan con la arquitectura contemporánea para crear un impresionante paisaje urbano. Por un lado, la Catedral de San Esteban, edificio de la Edad Media y de arte gótico. Justo enfrente, el moderno edificio Haas Haus, caracterizado por la gran cantidad de cristal y acero. Por el otro, el Palacio Imperial de Hofburg, el centro imperial y suntuoso del Imperio austrohúngaro. Delante, la Looshaus, símbolo de la época moderna de Viena. No muy lejos, se halla la Ópera Estatal, famosa en todo el mundo. Al lado, el museo Albertina que no solo alberga una de las colecciones gráficas más importantes del mundo, destaca especialmente por su techo voladizo (Soravia Wing), una destacable construcción moderna de vidrio y acero.

Las cafeterías tradicionales, que se caracterizan por su ambiente nostálgico, son muy populares entre los autóctonos y los turistas. Los salones de estilo rococó impresionan, por ejemplo, en el Demel, que desde 1786 es la pastelería imperial y real. En el Café Central del Palais Ferstel podrá admirar sus bóvedas de estilo neorrenacentista. En medio de la impresionante arquitectura del museo, los visitantes se sientan en las cafeterías del Museo de Historia del Arte y el Museo de Historia Natural. En la elegante calle Ringstrasse, el Café Landtmann, abierto en 1873, fue una de las primeras cafeterías de Viena. Otro clásico es el Café Sperl reformado con todo detalle y situado en el distrito 6 ha existido desde 1880. Desde 2011, la tradicional cultura vienesa de las cafeterías incluso forma parte del Patrimonio mundial inmaterial de la UNESCO.

Al regresar, vale la pena visitar el centro de la ciudad, situado a pocos pasos de la estación: la bonita Innsbruck, que se arrima de forma idílica al mundo montañoso de Tirol, sin duda es pequeña, pero ofrece edificios grandiosos. Los edificios góticos, renacentistas y barrocos alegran la vista. Especial mención merecen la Helblinghaus con su magnífica fachada de estuco barroca y, por supuesto, el famoso “Goldenes Dachl” (tejadillo dorado), un suntuoso balcón techado que el emperador Maximiliano I ordenó construir con exactamente 2.657 tejas de cobre doradas al fuego.

Bajo el reinado de Maximiliano I (1459-1519), Innsbruck fue el centro del Imperio de los Habsburgo. La capilla Hofkappelle y el palacio Hofburg aún recuerdan al "último caballero" en la transición de la Edad Media a la era moderna y las posteriores generaciones de soberanos de los Habsburgo. Ambos edificios albergan grandes tesoros artísticos: en la Hofkapelle, 28 estatuas de bronce sobredimensionadas, los "Schwarz Mander" (hombres negros), enmarcan el sepulcro de Maximiliano I. En el palacio Hofburg, que María Teresa amplió en el siglo XVII con un estilo barroco, el magnífico salón de fiesta y los apartamentos imperiales son impresionantes. Una de las novedades es la exposición "Maximilian1", que mediante instalaciones digitales arroja luz sobre aquella época.

Esta majestuosa fortaleza con sus muros de color claro se vislumbra desde lejos. Los orígenes de la fortaleza de Hohensalzburg se remontan al siglo XI. Hoy en día, Hohensalzburg es una de las atracciones turísticas más visitadas de Austria. Este emblema de Salzburgo permite echar un interesante vistazo a la historia de la ciudad y ofrece una magnífica vista panorámica de la ciudad. En verano de 2019, el museo de la fortaleza se renovó por completo. Con música, efectos de iluminación y proyecciones de vídeos, los visitantes pueden descubrir más datos sobre la historia del castillo en el "teatro mágico". El nuevo diseño de la colección de armas le permite probar posibles ataques y defensas en una fortaleza medieval mediante modelos interactivos. La fortaleza de Hohensalzburg se puede explorar individualmente con una audioguía.

Tarde o temprano, encontrará alguno de los castillos más fantásticos de Europa: el Palacio Mirabell, con su lujoso salón de mármol, considerado uno de los salones de boda más bellos del mundo, es un destino de ensueño para los románticos.

El Palacio Leopoldskron, por otro lado, es conocido por su impresionante ubicación a orillas de un pequeño lago y por ser lugar de rodaje de uno de los musicales más famosos del mundo: algunas escenas de Sonrisas y lágrimas se filmaron aquí. Si ha vivido la atmósfera única que impregna este palacio, sabrá por qué.

Los habitantes de la Alta Austria son gente tranquila. Les encanta ir en bicicleta. Con la bici puede continuar hasta Enns, una de las ciudades históricas más bonitas de este estado. El centro, con la imponente torre Stadtturm de 60 m de altura, continúa intacta. Igualmente hermosas, pero únicas en su estilo, son las históricas pequeñas ciudades de Steyr, Schärding, Gmunden y Wels. El distrito de Salzkammergut también es pintoresco por sus maravillosos paisajes de montañas y lagos. No es de extrañar que el emperador Francisco José y su esposa Sisí buscasen la tranquilidad en la neoclásica Villa Imperial de Bad Ischl lejos del ajetreo de Viena. Todavía hoy se percibe el aura única propia de los tiempos imperiales. Cuando se habla de Bad Ischl, Hallstatt no queda lejos. No solo porque este famoso lugar está muy cerca, también porque quien desea una combinación de romanticismo y aventura, está en el lugar indicado.

Una torre, frontones, balcones de madera y una ubicación espectacular justo en el lago Attersee: la elegante Villa Paulick en Seewalchen, en la región de Salzkammergut, es una verdadera joya. Fue construida en 1877 por el carpintero de la corte imperial y real Friedrich Paulick. Su ebanistería también hizo toda la carpintería. Una de las salas dignas de ver en esta elegante villa es el salón con techo artesonado. En él, Paulick usó partes del pabellón imperial, que había creado unos años antes para la exposición mundial de Viena. La familia Paulick convirtió la villa en un lugar de encuentro de la sociedad vienesa, que pasaba sus vacaciones de verano en el lago Attersee. Algunos de sus huéspedes habituales eran el pintor Gustav Klimt y su compañera, la modista Emilie Flöge. Hoy en día se pueden alquilar sus salas para eventos y hay algunas habitaciones para pasar la noche.

Aquí se ha sabido establecer un vínculo formidable entre pasado y futuro, entre lo tradicional y lo moderno. En medio de los edificios medievales del casco antiguo se hace su sitio el gigantesco edificio de color azul irisado. La Kunsthaus Graz, cariñosamente apodada “Friendly Alien”, es uno de los numerosos ejemplos de la atrevida arquitectura de Graz. La Murinsel (isla artificial en el río Mur), del artista neoyorquino Vito Acconci, recibe a sus visitantes como una ostra a medio abrir sobre el río Mur.

El Mumuth, la casa de la música y del teatro musical, está envuelto de una malla de metal monocromo. Y en el Jardín botánico, los invernaderos modernos de Volker Giencke forman un extraño contraste con las elegantes villas del barrio vecino.

Las orillas del lago Ossiacher See no solo atraen por poder divertirse en el agua, también por su interés arquitectónico. La Abadía de Ossiach, de unos mil años de antigüedad, se rehabilitó, reformó y amplió de forma sensacional en 2009. En los eventos culturales que se celebran todos los años, la fachada semitransparente entra en escena gracias a una hábil y espectacular iluminación de fondo.

Si no le apetece degustar los vinos de Burgenland galardonados internacionalmente in situ, tendrá muchas ocasiones tentadoras, aunque siempre con la arquitectura como fiel compañera de viaje: el agua baña por completo la construcción cúbica y amplia del Mole West, situado en pleno lago de Neusiedl.

El sol no solamente resplandece en la gran terraza, también en el interior del local orientado al sur, que, en caso de necesidad, cuenta con una membrana para proteger el interior de la luz solar. Tanto en el interior como en el exterior, podrá disfrutar de unas vistas espectaculares al lago de la estepa y al vasto horizonte.

El monumental monasterio de Klosterneuburg es un punto de atracción. Las dos torres de la colegiata, los techos de tejas rojas y las cúpulas verdes de los edificios del monasterio se erigen rectos hacia el cielo. Los canónigos agustinos han residido en el monasterio desde 1133. No solo se encargan de las tareas pastorales, sino que también dirigen la bodega y la explotación de árboles frutales más antiguas de Austria. Las visitas guiadas le permiten conocer el monasterio por dentro y las grandes obras de arte que alberga. Se ofrecen recorridos de una hora y de hora y media. Los recorridos, incluyen, entre otros, el claustro medieval, la colegiata barroca con el órgano original y el famoso Altar de Verdún de 1181.

En Vorarlberg, un estado pionero, la arquitectura se fusiona armoniosamente con el bello entorno natural y la eficiencia energética. Con una reconocida arquitectura y una alta densidad de edificios de calidad, especialmente en la capital Bregenz, este lugar se destaca como el estado de la arquitectura. El Festspielhaus y Kunsthaus son ejemplos notables de diseño con acero, cristal y hormigón. La sostenibilidad va más allá de las construcciones de madera, reflejándose en los espectáculos operísticos y festivales, como el de Bregenz en el Seebühne. Aquí, los asistentes pueden disfrutar de productos biológicos locales, incluyendo una amplia selección de quesos de la región.